miércoles, 28 de diciembre de 2011

Gato montés

El dia antes de Nochebuena la mañana fue bastante soleada por aquí, por el suroccidente y aproveche para ver algunos bandos de mitos, carboneros y pinzones que se movían buscando comida por los robledales de la zona. Después de una pequeña parada para tomar un café, volví a coger el coche para dar una vuelta hasta una zona desde la que, en esta época, se puede ver algún venado pastando al sol. Al pasar al lado de un prado que queda algo más elevado que la carretera, pude ver durante un momento, la figura de un gato de gran tamaño que casi seguro se podía tratar de un gato montés (Felis silvestris).

Por suerte la carretera hacía una curva con un apartadero al lado en el que pude parar el coche quedando fuera de la vista del gato, y él de la mía. Como siempre cuando hace falta, la cámara nunca está preparada. Toca sacarla de la mochila (toda revuelta), cambiar el objetivo y rezar para que la batería este cargada; está a medias pero espero que aguante. Cierro despacio la puerta y bajo un poco por la carretera. El gato sigue allí y es un gato montés precioso. Seguramente está cazando ratones en el prado. Le tiro alguna foto hasta que se da cuenta de que estoy allí pero parece no inmutarse. Se queda tranquilo mirándome y me muevo despacio para intentar encontrar un encuadre sin hierbas que molesten, pero desde donde estoy es imposible es encontrar nada mejor. La reacción del gato fue aplastarse contra el suelo para intentar pasar desapercibido, sin quitarme la vista de encima.

Alguna foto más y vuelvo hacia el coche para rodear el prado y tener otro punto de vista más alto. Asomo por una pequeña loma pensando que el gato se habría ido pero seguía allí sentado al sol. Otra foto más y se levanto para dirigirse hacia el bosque donde aún pude verlo antes de perderse entre los árboles.

Los gatos monteses son unos bichos preciosos, destacando especialmente los machos, de un tamaño mayor que las hembras. En esta época del año tienen un pelaje más denso, lo que hace que presenten un aspecto aún más impresionante.

En otras ocasiones que tuve algún encuentro con otros individuos de la especie, su comportamiento fue parecido; Suelen aguantar un rato observándote muy quietos, moviendo únicamente en ocasiones la cola nerviosamente, para a continuación desaparecer en el bosque, con paso firme y seguro pero sin mucha prisa, como si dominaran la situación en todo momento.

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Más caracoles

El caracol de la foto lo encontré en unos pastizales desarrollados sobre unas peñas calizas, en el Parque de Fuentes del Narcea. Buscando información de que especie puede ser, he llegado a la conclusión de que podría tratarse de Helicella itala. Los ejemplares de las fotos de dicha especie que localicé en internet tienen las franjas de la concha más claras que los que yo encontré, pero supongo que se debe a que se trata de conchas vacias y el paso del tiempo hace que pierdan intensidad los colores.

Así todo es la especie que más se asemeja y además coinciden otras características como el hábitat y en parte su área de distribución. Dicha especie tiene una amplia tolerancia ecológica pudiendo encontrarse desde bosques de ribera hasta prados calcáreos pasando por dunas y acantilados, a altitudes que van desde el nivel del mar hasta los 2.000 metros. Tiene dos periodos de reproducción anuales que coinciden con la primavera y el otoño.

En Asturias parece encontrarse con mayor frecuencia en la zona centro-oriental (terrenos principalmente calizos) siendo muy escaso hacia el occidente (terrenos fundamentalmente silíceos) por lo que esta población (de tratarse de Helicella itala) podría estar en el límite de distribución de la especie en la región.

¿Aterrizaje marciano o tres en raya gigante....?





... O también parte de una misteriosa campaña publicitaria, o simplemente una broma, eso sí, muy trabajada. Cualquiera de ellas puede ser la primera respuesta que se nos venga a la cabeza cuando vemos por primera vez los círculos que se muestran en la foto anterior.

Pero como se suele decir, a veces la realidad supera a la ficción. La respuesta en esta otra foto:

Ante esto solo tengo dos preguntas: La primera ¿Alguna vez el hábitat del urogallo presentó este aspecto o uno similar? Y la segunda ¿Que pasará por la cabeza de los destinatarios de la actuación (los urogallos) si alguna vez llegan a ver esto?. Seguro, seguro que lo flipan. Y es que a veces es para pensar ¡Que locos están esos humanos!

domingo, 27 de noviembre de 2011

Corzo desmogado

Al contrario que ciervos y gamos que pierden su cuerna en primavera, durante la época de mayor abundancia trófica, el corzo se desprende de la suya durante los meses de octubre y noviembre cuando los alimentos resultan más escasos. Inmediatamente después comienza a desarrollarse la nueva para, hacia los meses de marzo o abril, una vez alcanzado su total desarrollo, comenzar a frotarla contra troncos y ramas para desprenderse de este modo del correaje que la protegió durante el crecimiento.

En el ejemplar del video se ven los pivotes sobre los que se desarrolla la cuerna. No parece apreciarse aún la nueva por lo que seguramente hace poco tiempo que se ha desprendido de la anterior. También puede verse que el pelaje es más denso y de un color más grisaceo que el que tienen en verano, que es de un color más castaño.

Otro detalle que puede observarse en el video, cuando se gira, es la brocha de la pata trasera derecha. Es la mancha de color oscuro situada en la parte externa del metatarso, debajo de la articulación de la pata. La brocha junto a las interdigitales y a las situadas en la base de los cuernos son los tres tipos de glándulas que tienen los corzos y cuyas secreciones tienen finalidad territorial y sexual.

martes, 15 de noviembre de 2011

Hayedos

Estos días pueden verse en todo su esplendor otoñal los hayedos de la Cordillera Cantábrica, con toda una amplia gama de colores desde el verde al amarillo pasando por distintos tonos de ocres.

En España los hayedos ocupan más de 300.000 hectáreas de superficie, principalmente por la zona norte desde los Ancares lucenses hasta los Pirineos, pudiendo encontrarse también hayedos relictos en el Sistema Central. En Asturias, la superficie cubierta por este tipo de bosque es de unas 56.000 hectáreas. Pese a lo que puede pensarse, la irrupción del haya (Fagus sylvatica) en la Península es relativamente reciente, hace aproximadamente unos 5.000 años, produciéndose su mayor expansión en los últimos 3.000 años.

El haya es una especie amante de la sombra necesitando sobre todo en sus primeros años una cubierta o dosel protector. También necesita un cierto grado de humedad ambiental, prosperando en zonas con abundantes nieblas y en laderas preferentemente orientadas al norte, entre los 700 y los 1.900 metros de altitud. Sus raices son bastante superficiales por lo que los vientos fuertes pueden derribar ejemplares, abriéndose de este modo claros en el bosque, que van a favorecer el desarrollo de otras especies.

Florecen entre los meses de abril y mayo y sus frutos, los hayucos ricos en grasas, maduran en los meses de septiembre y octubre. Una característica de la especie es su vecería; a un año de excelente cosecha de hayucos siguen varios años de producción prácticamente nula. En la Península, las cosechas buenas suelen acontecer cada tres o cuatro años aproximadamente y pueden llegar a producir cerca de 1.000 kilos de hayucos por hectárea.

Otra característica es que la densidad de las ramas y hojas de las hayas impiden el paso de gran cantidad de luz con lo cual llegan a dominar a otras especies arbóreas mas heliófilas y se asocian a especies de temperamento parecido al suyo como los tejos o los acebos. En cuanto a otras plantas, en el oscuro sotobosque de los hayedos apenas encontramos unas pocas especies que deben darse prisa en florecer antes de que broten las hojas de las hayas e impidan el paso de la luz hasta el suelo. La ventaja es que pasear por el interior de los hayedos es bastante fácil ya que apenas encontraremos matorrales. Además cuando aprieta el calor durante el verano, la temperatura en el interior del hayedo será varios grados más baja siendo más agradable el paseo.

En cuanto la madera, es fácil de trabajar y apenas tiene olor por lo que se emplea para fabricar utensilios de cocina como recipientes, cucharas, tenedores etc… También se emplea para leña debido a su gran poder calorífico y su lenta combustión. El tradicional aprovechamiento de las ramas bajas para su empleo como leñas ha dado lugar a ejemplares trasmochos, abundantemente retorcidos y con numerosas oquedades que son un excelente refugio para diferentes especies.

En cuanto a la fauna los hayedos albergan a las especies más representativas como el oso y el urogallo además de otras como lirones grises y caretos, corzos, jabalíes, zorros, tejones, pito negro, trepadores azules etc… Son también importantes las especies de insectos presentes entre las que destaca el cerambícido Rosalia alpina.

Los hayedos más importantes del Principado de Asturias en cuanto a su extensión y estado de conservación son, probablemente, el Monte Redes en Caso y el Hayedo de Hermo en Cangas del Narcea. En Tineo podemos encontrar algunos hayedos, de poca extensión, en la zona de los Cadavales, o formando pequeños rodales dentro de otros bosques al largo de todo el concejo. También pueden verse ejemplares aislados de haya de gran porte como, por ejemplo, los que hay en el paseo de los Frailes, entre el campo de San Roque y Tineo.

viernes, 4 de noviembre de 2011

Una especie que se resiste

A pesar de no ser escasa, la gineta (Genetta genetta) es una especie particularmente difícil de avistar para mi; de hecho la primera vez que vi un ejemplar vivo fue hace escasos meses, cuando cruzó una delante del coche cerca de Salas. El segundo ejemplar que vi fue el mismo día que los lobos de la entrada de hace unas semanas, también al cruzar la carretera. Con la cámara automática pasa tres cuartos de lo mismo; mientras otras especies como la marta se dejan fotografiar con relativa facilidad, en todo el tiempo que lleva funcionando la cámara, solo conseguí alguna foto y un par de videos y únicamente en dos de los lugares en los que la coloqué. En uno de los videos solamente se ve la cola mientras que en el otro se ve al ejemplar completo pero durante unos fugaces dos segundos.

Con las fotos no hubo mucha más suerte; ninguna foto de todo el bicho excepto la que acompaña el texto que se ve completo pero no tiene una gran nitidez. En el resto, la cola o el lomo pero nada más. No se cual es la razón. Puede ser su discreción, que hace que sea una especie desconocida para mucha gente a pesar de que viven en las proximidades de sus pueblos, o que su densidad en esta zona sea menor que la de las martas porque el hábitat no sea el más idóneo para la especie etc… En fin, que habrá que seguir intentándolo.

sábado, 22 de octubre de 2011

Caracol de Quimper

Incluido en la Directiva Hábitats, el caracol de Quimper (Elona Quimperiana) es un molusco gastrópodo terrestre cuyo hábitat típico en la Península son los bosques caducifolios umbríos de la España Atlántica, desde Galicia hasta el Pais Vasco. Su rasgo más característico es su concha, enrollada en espiral en el mismo plano. Es una especie muy difícil de observar en vivo, siendo más frecuente encontrar conchas vacías. A veces es posible ver algún ejemplar después de lluvias intensas o por la noche. Durante el día se refugian en cuevas, debajo de piedras, troncos u hojarasca, casi siempre en zonas húmedas con abundante musgo y en las cercanías de cursos de agua.

Son principalmente herbívoros, aunque ocasionalmente pueden alimentarse de excrementos y materia en descomposición. Parece que es una especie en regresión en toda su área de distribución debido a alteraciones del hábitat como los incendios forestales y sobre todo la sustitución de los bosques caducifolios típicos del norte de la Península por especies como pinos o eucaliptos.

A los ejemplares de las fotos, los primeros de la especie que conseguí ver, los encontré en un hábitat típico, bajo unas grandes piedras cubiertas de musgo al lado de un arroyo que discurre a través de uno de los más importantes hayedos del suroccidente de la región.

viernes, 14 de octubre de 2011

Azafranes

Con la llegada del otoño comienzan a verse por los prados y pastizales numerosas flores que surgen a partir de bulbos subterráneos. Pertenecen a distintos géneros, pero la mayoría de ellas son conocidas popularmente como quitameriendas, independientemente de la especie de que se trate.



Así podemos encontrar merenderas (Merendera montana), cólquicos (Colchicum autumnales) o los Crocus, género al que pertenecen los azafranes, tanto los cultivados como los silvestres. Cólquicos y Crocus son bastante parecidos, pudiendo diferenciarse porque las flores del cólquico tienen seis estambres mientras que las de los Crocus tienen tres.



Las flores que pueden verse en las fotos pertenecen a este último género ya que poseen tres estambres. Posiblemente se trate del llamado Azafrán de Asturias (Crocus serotinus subsp. Asturicus) planta endémica del noroeste de la península ibérica y que parece encontrarse cada vez con mayor frecuencia en el occidente de la región, donde parece estar desplazando al Crocus nudiflorus. En el prado en el que hice las fotos podían verse gran cantidad de estas flores de color azulado, destacando entre ellas seis o siete ejemplares completamente blancos, entre los cuales se encontraba el ejemplar de la foto.

jueves, 6 de octubre de 2011

Endrinos


El endrino o espino negro (Prunus espinosa) es un arbusto espinoso de copa densa que puede encontrarse desde zonas bajas hasta unos 1.500 metros sobre el nivel del mar. Suele encontrase formando parte de las sebes de los prados. Su fruto de color azulado es muy rico en vitamina C y sirve para elaborar licores como el conocido pacharán. Para ello se maceran los frutos en aguardiente durante varios meses, pasados los cuales se filtra y se consume directamente. Hay quien añade una rama de canela o unos granos de café, según gustos.

Sapo común


Al sapo (Bufo bufo) de las fotos lo encontré al mover unos sacos amontonados al lado del pajar de casa. Debido al desconocimiento, y porque no decirlo a su para algunos poco agraciado aspecto, el sapo común nunca ha tenido “buena prensa” entre la gente de los pueblos. Así era frecuente que, al encontrarse algún ejemplar durante las faenas del campo, éste acabase ensartado en una pala de dientes. Afortunadamente, poco a poco van cambiando este tipo de comportamientos, aunque de vez en cuando todavía es posible encontrarlos. Lo cierto es que si estas personas supiesen la gran cantidad de insectos, babosas etc… que consumen los sapos durante sus correrías nocturnas por prados y huertas, posiblemente cambiasen su opinión sobre ellos.



Los ejemplares adultos de la especie únicamente acuden al agua para reproducirse, momento en el cual los machos emiten su canto para convencer a las hembras de que él es el mejor que pueden escoger. En ocasiones pueden verse varios machos intentando aparearse con la misma hembra. Ponen los huevos en el agua, en cordones que pueden agrupar varios miles de ellos. La fase larvaria dura entre dos y cuatro meses, en función de diversos factores como la disponibilidad de alimento o la temperatura del agua. Los juveniles recién metamorfoseados apenas alcanzan el centímetro de longitud, pero crecen con gran rapidez.



Entre sus enemigos, además del hombre, se encuentran diversas especies como águilas calzadas, águilas culebreras, víboras y mustélidos ligados al medio acuático como la nutria y los turones que dejan restos característicos como la piel y la cabeza sin consumir. Para defenderse de todos ellos, los sapos secretan a través de las glándulas de la piel, especialmente de las paratoideas que se encuentran situadas detrás de los ojos, una sustancia irritante para las mucosas. Hay que decir que no resultan peligrosas para el hombre y si alguna vez se toca algún individuo basta con lavarse las manos bien. Otra forma de defensa, que puede verse en la foto, es hincharse y erguirse sobre las patas, aparentando de esta manera tener un tamaño mayor del que en realidad tienen. En el caso de las larvas parece ser que, cuando son heridas, desprenden una sustancia que hacer que el resto de larvas de las proximidades se alejen de la zona de peligro.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

Así da gusto madrugar

Ayer, tras un par de días de descanso y viendo que daban buen tiempo, decidí pegarme un madrugón para hacer una espera con la esperanza de ver algún lobo, en una zona en la que sabía por un compañero que había un grupo familiar. A las cinco y media suena el despertador, un desayuno rápido y al coche. El cielo se ve completamente despejado y estrellado por lo que la cosa pinta bien. Llego al sitio de la espera con las primeras luces. Vacas y rebecos comienzan su actividad. De momento no se ve nada. Sobre las ocho y cuarto me muevo un poco en el collado en el que me encuentro para ver una zona donde pastan varios rebecos y de pronto a mi espalda y a lo lejos oigo el aullido inconfundible de un lobo adulto. Al instante comienzan a aullar los cachorros respondiendo. Comienzo a mirar con los prismáticos la zona donde se oyen pero no veo nada. Poco a poco el sol va cogiendo altura y comienza a calentar la mañana. Dejo la mochila en el suelo y me muevo unos metros para ver otra zona; una pareja de corzos aparecen entre los brezos y salen a una pequeña campera a pastar. Son ya las nueve de la mañana y vuelvo a mirar desde donde había dejado la mochila. Al enfocar con los prismáticos a un tserón iluminado por el sol ¡Bingo! Ahí están, tres preciosos ejemplares. Uno pronto se retira hacia unos matorrales y los otros dos se quedan un rato hasta que uno de ellos baja por el borde del tserón y se pierde entre los matorrales. El otro se tumba tranquilamente sobre una piedra a tomar el sol, para tras unos quince minutos, coger el camino de los anteriores para encamar entre los brezos. Ya solo quedaba recoger los trastos y, poco a poco, regresar al coche para bajar a tomar un café.

Y es que hacía mucho tiempo que no veía los lobos. Si los había oído aullar alguna noche, pero desde que me fui a trabajar a Oviedo no había vuelto a verlos por lo que la mañana de hoy será de esos días que voy a recordar mucho tiempo. Como el primer día que los oí aullar; una calida noche de agosto y tres aullidos largos de un adulto que parecían expresar una enorme tristeza por las injustas persecuciones que tienen que soportar y que apagaron el coro de insectos que podían oírse unos instantes antes (o al menos eso me pareció a mí). O los nervios de la tarde en la que hace unos años, y junto a otros tres compañeros, pudimos ver en la sierra de Tineo cinco preciosos cachorros de unos dos meses acompañados por un adulto que no les quitaba el ojo de encima.

Y es que son unos animales que impresionan; impresiona su mirada, su aullido, su inteligencia, sus pautas de conducta social y su capacidad de adaptación resistiendo la persecución a la que ha estado sometido por el hombre desde tiempos remotos.

Parece que nuevamente se acercan tiempos difíciles para el lobo con su probable declaración como especie cinegética en Asturias pero confiemos en que como decía el recordado Félix Rodríguez de la Fuente “Que el lobo viva donde pueda y donde deba vivir, para que en las noches españolas no dejen de escucharse los hermosos aullidos del lobo”.

Nota: Las imágenes no tienen apenas calidad debido a la distancia a la que me encontraba y son simplemente testimoniales. Lo mejor de estos momentos, sin duda es el recuerdo que te queda de ellos.

Operación camaleón

Este año durante las vacaciones repetimos el destino del pasado año, Sancti Petri en la provincia de Cádiz. Como ya conté en una entrada anterior, el año pasado intenté ver camaleones sin éxito, por lo que tenía una espina clavada y una tarea pendiente para este año. Así que decidí volver a la misma zona donde había estado buscando el verano anterior. Estuve una tarde dando un paseo pero como me temía, sin suerte. Lo que si pude ver fue algún conejo de monte en el pinar y lo que más me sorprende alguna perdiz roja con perdigones. Y es sorprendente porque viven y crían en medio de las urbanizaciones, en las pocas zonas de vegetación que quedan, a la entrada mismo del hotel.

Como ya esperaba no encontrar nada, a través de Google Earth tenia localizada otra zona que aparentaba ser un hábitat ideal para la especie, aunque rodeada, como prácticamente todo, de urbanizaciones y chalets, por lo que tampoco las tenia todas conmigo. Pese a todo, el día antes de regresar a Asturias, decidí coger el coche y acercarme a intentarlo. Primer miré en una zona de marisma sin rastro alguno. Luego estuve mirando en una zona de dunas con algunos pinos dispersos y arbustos, ideal para encontrarlos, según todo lo que había leído. Tras dos horas de búsqueda, y muchas vueltas, ya estaba a punto de irme, cuando de repente, por el rabillo del ojo, veo algo de movimiento a los pies de un arbusto y al fijarme bien, veo un precioso camaleón de color verde que está intentando subirse a una rama. Pero al mover la rama para intentar verlo mejor, ¡Oh sorpresa!, la idea que tenía de ellos de animal lento y de movimientos pausados se va al garete; Y es que empieza a moverse por las ramas tan rápidamente y a adentrarse hacía el interior del arbusto, que cuando me doy cuenta de la cámara de fotos y la preparo, no se si había cambiado de color, se había movido más, o las dos cosas. El caso es que desapareció en un momento.

Por lo menos había conseguido ver uno aunque, digamos que faltaban las pruebas, la foto. Como sabía que iba a tener que aguantar alguna broma que otra, el día de volver a casa, mientras el resto de la familia iba a aprovechar la última mañana en la playa, yo madrugué, desayune rápidamente en el hotel y volví a ver si conseguía sacar alguna foto. Tras otras muchas vueltas, y cuando ya me iba a ir con una sensación agridulce, vi un movimiento raro en una rama, me acerqué con la cámara preparada y allí estaba, ¡otro precioso camaleón!. Esta vez no esperé; el enfoque automático de la cámara no funciona por lo que tuve que enfocar manualmente entre un montón de ramas. Eso y la velocidad a la que se movía entre las ramas antes de desaparecer hace que las fotos no sean gran cosa, pero al menos me servirán como recuerdo. Además, así tengo la excusa perfecta para poder regresar algún día e intentar mejorarlas.

Y es que son unos animales curiosos; Tienen una cola enrollada con la que se ayudan a cogerse a las ramas, los ojos se mueven independientemente con lo cual pueden localizar mejor sus presas y capturarlas proyectando su larga y pegajosa lengua. Pero su característica más conocida es su capacidad de camuflaje, cambiando de color para literalmente “desaparecer” Pero los cambios de color no solo se producen para camuflarse sino que también sirven para reflejar estados de ánimo o estados físicos pudiendo encontrar libreas que expresan irritabilidad, celo, gravidez etc…

miércoles, 7 de septiembre de 2011

En algún lugar de la Cordillera...


...este precioso ejemplar de oso pardo (Ursus arctos), posiblemente un macho, se encontraba a media mañana de un día soleado del pasado mes de agosto comiendo moras con gran apetito.



Y es que este año, la cosecha de arándanos no ha sido particularmente abundante por lo que los osos, y otras especies que se alimentan de ellos, han tenido que buscar otras alternativas en espera de que llegue la cosecha de castañas y bellotas que van a permitirles almacenar las grasas suficientes de cara al invierno.

El lobo y los buitres



El video que acompaña al texto tiene ya unos años. La calidad no es muy buena por que ya pasó por varios formatos cinta de la camara, de video, ordenador etc..



En el se puede ver un lobo comiendo los restos de una vaca que había muerto alcanzada por un rayo. Alredeor de él, varios buitres esperan su turno, pero, el hambre les va haciendo acercarse cada vez un poco más, hasta que llega un momento que el lobo considera que han sobrepasado la línea y arremete contra elolos para continuar comiendo tranquilamente.

El la foto se puede ver como parece enseñarles los dientes.

jueves, 25 de agosto de 2011

Genciana


La genciana (Genciana lutea) es una planta herbácea que puede alcanzar más de un metro de altura. Tiene una raíz larga y carnosa. Las hojas son ovaladas, siendo las de la base más largas que las del resto de la planta. Las flores, de color amarillo, brotan en la mitad superior del tallo entre los meses de junio y agosto Crece principalmente en pastizales de montaña sobre suelos de carácter silicícola.

En Asturias podemos encontrar dos variedades de esta planta; en el centro y oriente crece la subespecie Genciana lutea var lutea cuyas flores son, como mencionaba más arriba de color amarillo. En las montañas de la zona occidental, en cambio, está presente la variedad aurantiaca, que se caracteriza por tener las flores de color anaranjado o rojizo y a la cual pertenece el ejemplar de las fotos.

En las raíces de las dos variedades aparecen compuestos amargos como la amarogencina que es el compuesto natural más amargo que se conoce. Debido a esto, las raíces se emplean en la elaboración de medicinas y licores, aunque hay que recordar que en Asturias está prohibida la recolección, ya que la genciana se encuentra incluida en el Catálogo Regional de Especies Amenazadas de la Flora.

jueves, 18 de agosto de 2011

Lagartija de Turbera


La lagartija de turbera (Lacerta vivipara) es un reptil de amplia distribución, desde Irlanda y Galicia por el Oeste hasta el mar de China al Este y entre Noruega al Norte y la Cornisa Cantábrica, Rumanía y Bulgaria por el Sur. Se la puede encontrar desde el nivel del mar hasta más de 2.000 metros de altitud.

Es una especie ligada a zonas húmedas siendo su hábitat ideal las turberas, prados húmedos, lindes de bosques y arroyos de montaña. Durante los peores meses del año se encuentran inactivas, observándose los primeros ejemplares a partir de marzo o abril. En las poblaciones ibéricas las hembras son ovíparas, realizando la mayoría de ellas una única puesta por temporada. Los huevos permanecen durante mucho tiempo en el interior de la hembra comenzando ya el desarrollo de los embriones, con lo que una vez efectuada la puesta, el periodo de incubación de los huevos es más corto produciéndose la mayoría de las eclosiones en agosto y septiembre.

Se alimenta principalmente de insectos, lombrices, caracoles y babosas. Por el contrario, adultos y crías pueden entrar a formar parte de la dieta de la culebra lisa y la víbora de Seoane así como de numerosas aves tanto diurnas como los cernícalos y aguiluchos pálidos como nocturnas, mochuelo etc...

jueves, 11 de agosto de 2011

Ditisco


El ditisco (Dytiscus marginalis) es un escarabajo buceador de hasta 35 mm de longitud. Macho y hembra presentan diferencias externas; los élitros (alas externas endurecidas) del macho son lisos mientras que los de la hembra presentan unos surcos longitudinales. Además los tarsos de las patas anteriores de los machos presentan unas ventosas que facilitan la sujeción de la hembra durante la cópula. Sin ellas sería más complicado el apareamiento ya que la superficie del insecto está cubierta de una sustancia muy deslizante que repele el agua.

Las patas traseras en ambos sexos poseen unos pelos que ayudan a impulsarse mientras nadan. Respiran aire del exterior, sacando ligeramente el extremo del abdomen, y almacenándola entre los élitros. Repiten este proceso entre cuatro y siete veces cada hora. Poseen una vejiga rectal con una doble función, por una parte actúa como un sistema hidrostático y por otro lado es un arma defensiva ya que en ella almacena sustancias malolientes que expulsa cuando es molestado.

Suelen realizar vuelos nocturnos desplazándose a grandes distancias en busca de nuevas masas de agua. Su alimentación consta de insectos, renacuajos e incluso pequeños peces. Las larvas, de hasta 60 mm. de largo son activas depredadoras de invertebrados acuáticos.

Rescatando ranas


Hace aproximadamente un mes que me reincorporé a mi plaza de Guarda del Medio Natural en el Parque de Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias y la verdad es que no echo de menos el trabajo anterior en la misma Consejería de Medio Ambiente, pero en Oviedo; Bueno, si acaso, únicamente echo de menos a algunos compañer@s pero….¡eso es otra historia!. Ahora tengo más contacto con la naturaleza y mucho tiempo que recuperar.

Mientras trabajaba uno de estos días pasados, encontré en un camino un agujero de aproximadamente un metro de diámetro y setenta centímetros de profundidad; no había sido excavado sino que se había formado al hundirse el terreno. Estaba próximo a unas charcas por lo que en el interior del mismo había unos cuantos juveniles de ranas y sapos recién metamorfoseados que eran incapaces de salir trepando por las paredes.

Así que estuve un buen rato sacando todos los que pude y colocando unas ramas en el interior para que pudiesen salir algunos que quedaban escondidos en pequeños agujeros y también los que pudiesen caer dentro más adelante. Espero que sirviesen para algo.

viernes, 29 de julio de 2011

Digitalis

¿Quién no ha estallado alguna vez las flores de la Digitalis purpurea, la popularmente conocida dedalera o estallones? De grandes flores colgantes de color púrpura y en forma de tubo, se encuentra ampliamente distribuida por toda Asturias. Se trata de una planta bianual; el primer año consta de un rosetón de hojas que florecerán al año siguiente.

Contiene una sustancia, la digitalina, con propiedades cardiotónicas, la cual actúa sobre la musculatura del corazón, pudiendo resultar por ello altamente tóxica.

En ocasiones, entre las flores púrpuras es posible encontrar algunos ejemplares cuyas flores son de un precioso color blanco como el de la foto.

Dos videos más

Aquí dejo otro par de videos de la caja nido de los carboneros. No pude grabar más porque al volver de las vacaciones ya habían abandonado la caja. En el primero de ellos se ven los pollos sin emplumar y como entra uno de los adultos a cebar. ¡Ojo al pedazo de gusano que se traga uno de los pollos y los esfuerzos que tiene que hacer para tragarlo! Al final y despues de mucho pelear por fin lo consigue. En el otro video ya se les ve emplumados y a pocos días de saltar fuera.



jueves, 14 de julio de 2011

Golondrinas

En entradas anteriores hablaba de los colirrojos que estaban criando en el nido de golondrinas (Hirundo rustica), pero ¿Qué han hecho estas al comprobar que tenían el nido ocupado?

Pues empezar a buscar un sitio adecuado para construirse otro. Y lo encontraron en otra viga a la entrada de la cuadra. Aprovecharon un par de puntas que había clavadas en ella para comenzar a pegar el barro. Tras un montón de viajes ya se veía que el barro no debía de ser de buena calidad; parecía muy blando y se caía muy fácilmente.

Para evitar que manchasen mucho el suelo con él, y una vez que estuviese finalizado, con los excrementos de los pollos, coloque una tabla atornillada a la viga justo por debajo de donde habían empezado la construcción. Nada más ponerla abandonaron la idea de construirlo sobre las puntas de la viga ya que vieron que era mucho más fácil, rápido y seguro comenzar a construirlo directamente sobre la tabla.

Dicho y hecho, comenzaron a acumular barro y avanzaron más en una semana que en las dos o tres anteriores. Tras acabarlo comenzaron a incubar tres huevos. Al cumplirse el tiempo y tras ver que no salía ningún pollo, abandonaron el nido. Al revisar los huevos pude comprobar que ninguno de ellos estaba fecundado. Esperemos que la próxima vez tengan más suerte.

lunes, 4 de julio de 2011

Murcielago

La característica más llamativa de los murciélagos es el vuelo. Es la más llamativa porque se trata de mamíferos, aunque a estas alturas todavía hay gente que parece no enterarse y es que personalmente he llegado a ver hace un tiempo un estudio de impacto hecho por un ingeniero de minas en el que se cita, entre otros, a los murciélagos como textualmente “aves de rapiña nocturna”. Para desarrollar esta actividad (el vuelo) su cuerpo presenta una serie de adaptaciones uniforme a todas las especies. Tienen un gran desarrollo de los huesos de las extremidades anteriores, característica esta muy notable en los huesos de lo que sería la mano, y presentan una fina membrana de piel denominada patagio que es la que le proporciona la capacidad de vuelo. Otra característica es su nocturnidad. Parece que eligieron esta opción debido a que de este modo evitaban la competencia con las aves, las cuales en su mayoría son diurnas. Aprovechaban pues un nicho temporal vacío. Llegados a este punto habría que preguntarse que permitió a los murciélagos el triunfar en la conquista de la noche. La respuesta vendría de la mano de otra de sus características como es el sistema de ecolocación que le permite orientarse y desarrollar plena actividad en la más absoluta oscuridad. Los murciélagos emiten ultrasonidos por la boca o la nariz, los cuales al chocar contra los objetos rebotan y son recibidos por las orejas; el cerebro procesa los datos y de este modo obtienen un mapa del medio en el cual se encuentran. Cada especie de murciélago emite una frecuencia determinada de ultrasonido lo cual permite, con un detector adecuado, diferenciar entre las diferentes especies que habitan una zona.

La alimentación de los murciélagos está basada en los insectos; en una noche capturan cientos de ellos con los consiguientes beneficios para la agricultura y el ser humano en general. El problema que presenta este tipo de alimentación es que durante el invierno, los insectos prácticamente desaparecen y el vuelo requiere mucha energía. La solución pasaría por emigrar a lugares más cálidos, lo cual no se sería posible porque requeriría una capacidad de vuelo mucho más perfeccionada, o bien optar por la estrategia de la hibernación, que es la que han elegido. Durante este periodo, se retiran a lugares con temperatura más o menos uniforme como cuevas, disminuyen su temperatura corporal y restringen su actividad metabólica, pasando a vivir durante este periodo de los acúmulos de grasas.

El celo suele producirse en otoño, si bien en muchas especies los espermatozoides son retenidos por la hembra para producirse la fecundación una vez pasado el periodo de hibernación. Durante la gestación las hembras suelen reunirse en colonias lo cual facilita la creación de unas condiciones ambientales favorables; a mayor concentración de individuos más calor ambiental, con lo cual disminuye el gasto energético que utilizaría el individuo para mantener la temperatura, pudiendo destinar más recursos al desarrollo del feto. Las crías nacen con una dentición fuerte para poder agarrarse al pecho de la madre evitando así una caída de consecuencias fatales.

Podemos localizar muchas de estas especies asociadas a construcciones humanas como desvanes, sótanos, cuadras, grietas de edificios e incluso cajas de persianas. En el caso del ejemplar de la foto, lo encontré colgado del techo de la bodega de casa. Supongo que entra a través de algún pequeño agujero de la pared puesto que las ventanas están cerradas. Por el diseño de la cara se trata de un Rinolofido, conocidos normalmente como murciélagos de herradura. La peculiar estructura que poseen interviene a modo de antena parabólica en la ecolocación, dirigiendo los ultrasonidos que emiten por la nariz. No tengo experiencia en el reconocimiento de las especies y dudo entre murciélago grande de herradura (Rhinolophus ferrumequinum) y murciélago pequeño de herradura (Rhinolophus hipposideros), aunque me inclino más por el primero, al menos me pareció de un tamaño que encaja más con las medidas que encontré para esta especie. Si alguien se anima a opinar….

viernes, 17 de junio de 2011

Corza con cría

El siguiente video está grabado el pasado mes de mayo. En el se puede ver una corza con su cría de unas pocas semanas de vida. Probablemente es la misma corza de la cual ya puse alguna foto en una entrada anterior ya que estan hechas en la misma zona que el video. Por otro video que habia grabado unos dias antes ya sabía que había un pequeño porque salía fugazmente en él; su madre había activado el sensor de la camará y esta comenzó a grabar justo cuando estaba ya pasando él, quedando únicamente registrado medio cuerpo. En este, sin embargo, ambos quedan perfectamente retratados.

miércoles, 15 de junio de 2011

Webcam

Han tardado, pero por fin está ocupada la caja nido en la que había colocado la webcam. Hace tiempo que la habían rellenado de material pero ni rastro de los huevos. Había otra caja cerca y es posible que rellenasen las dos de material y se decidiesen por esa otra para sacar la primera pollada. El caso es que al revisar la caja con la cámara, sin mucha esperanza la verdad, vi que había ocho huevos en su interior. En el vídeo que se adjunta se ven los huevos durante los primeros 30 segundos. Luego durante otros 30 segundos se ve al pájaro totalmente acurrucado incubando durante la noche y en la parte final se le ve ya durante el día. Si todo sigue su curso espero poder grabar alguna ceba y el desarrollo de los pollos para ir subiendo los videos.

martes, 14 de junio de 2011

Casi listos



Así están los pollos de la pareja de cigüeñas que han vuelto a criar en la zona de la Millariega. En esta foto se pueden ver acompañados de uno de sus padres. Los pollos tienen el pico de color oscuro mientras que en los ejemplares adultos es de color naranja.


Este año han tenido que reconstruir el nido en otro árbol a escasos metros del anterior ya que este fue parcialmente derribado el año pasado durante el fuerte temporal del mes de junio.


Si no ocurre ninguna sorpresa en los pocos días que les quedan en el nido, pronto habrá otro par de cigüeñas sobrevolando los campos de Tineo.

jueves, 9 de junio de 2011

Fozando tranquilamente

Asi está el jabalí del video, a una hora no muy habitual, aunque fuera de la temporada de caza están más confiados y es posible ver algún ejemplar a plena luz del sol. De hecho, el día que fuí a colocar la cámara tropecé a las seis y media de la tarde con un grupo de unos cinco o seis que estaban "fozando" tranquilamente entre un prao y el bosque de castaño y roble en el que finalmente coloque la cámara.

Incubando,...



...en concreto 4 huevos. Así se encontraban los mirlos acuáticos hace pocos días. Dentro de una bola de hierbas y musgo situada en una pequeña repisa de piedras que hay debajo de la sala del molino, donde se aloja el mecanismo de giro, el árbol y el rodezno.





En este sitio se encuentran protegidos de los depredadores por la cortina de agua que cae desde la presa y sale hacia el río nuevamente.